Texto Base: Salmo 34:19
“Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.”
Introducción
La vida cristiana no está exenta de dificultades. Este versículo nos recuerda que el justo, a pesar de vivir en obediencia a Dios, enfrentará muchas aflicciones. Sin embargo, la promesa de Dios es clara: Él será nuestro libertador en cada prueba. Este bosquejo nos ayudará a reflexionar sobre el significado de las aflicciones, cómo enfrentarlas con fe y cómo experimentar la liberación de Dios.
I. La realidad de las aflicciones del justo
A. La condición del justo
- ¿Quién es el justo?
- Es aquel que vive conforme a la voluntad de Dios y busca Su justicia.
- Romanos 5:1: “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.”
- El justo no está exento de problemas
- Ser justo no significa estar libre de dificultades, sino contar con la presencia de Dios en medio de ellas.
- Mateo 5:45: “Hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.”
B. La certeza de las aflicciones
- Promesas de sufrimiento
- Jesús aseguró que en este mundo tendríamos tribulaciones.
- Juan 16:33: “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
- Aflicciones como parte de la vida cristiana
- El apóstol Pablo enseñó que todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús sufrirán persecución.
- 2 Timoteo 3:12: “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución.”
C. Tipos de aflicciones
- Pruebas externas
- Enfermedades, problemas económicos, persecuciones.
- Job 1:21: “Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.”
- Pruebas internas
- Luchas emocionales, dudas, tentaciones.
- Romanos 7:18-19: “Porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.”
II. Propósitos de las aflicciones
A. Para fortalecernos espiritualmente
- Desarrollar paciencia y carácter
- Las pruebas producen madurez espiritual en nuestra vida.
- Romanos 5:3-4: “La tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza.”
- Fortalecer nuestra fe
- Las aflicciones nos enseñan a depender más de Dios.
- 1 Pedro 1:6-7: “Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro.”
B. Para mostrar el poder de Dios
- Dios se glorifica en nuestras debilidades
- A través de nuestras pruebas, el poder de Dios se manifiesta.
- 2 Corintios 12:9: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.”
- Testimonio para otros
- Las aflicciones permiten que otros vean la fidelidad de Dios en nuestra vida.
- Salmo 40:3: “Puso luego en mi boca cántico nuevo… verán esto muchos, y temerán.”
C. Para moldearnos a la imagen de Cristo
- Ser transformados a Su semejanza
- Las aflicciones nos conforman al carácter de Cristo.
- Romanos 8:28-29: “A los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.”
- Aprender obediencia
- Como Jesús, aprendemos obediencia a través del sufrimiento.
- Hebreos 5:8: “Aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia.”
III. Cómo enfrentar las aflicciones del justo
A. Confianza en las promesas de Dios
- Dios está con nosotros en medio de las pruebas
- Nunca enfrentamos las aflicciones solos; Dios está presente.
- Isaías 43:2: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo.”
- Dios es fiel para librarnos
- La liberación de Dios puede ser inmediata o en Su tiempo perfecto.
- Salmo 34:19: “De todas ellas le librará Jehová.”
B. Perseverar en la fe
- No rendirse
- Las pruebas no son permanentes; tienen un propósito divino.
- Gálatas 6:9: “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos.”
- Permanecer firmes en la fe
- Debemos confiar en Dios y resistir al enemigo.
- 1 Pedro 5:8-9: “Sed sobrios, y velad… resistid firmes en la fe.”
C. Orar y buscar la fortaleza de Dios
- Clamar a Dios en nuestras aflicciones
- La oración es nuestro refugio en tiempos de dificultad.
- Salmo 50:15: “E invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás.”
- Depender del poder del Espíritu Santo
- El Espíritu Santo nos consuela y fortalece en medio de las pruebas.
- Romanos 8:26: “El Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.”
D. Alabar a Dios en medio de las aflicciones
- Adoración como respuesta a las pruebas
- Alabar a Dios en la dificultad demuestra nuestra confianza en Su soberanía.
- Habacuc 3:17-18: “Aunque la higuera no florezca… con todo, yo me alegraré en Jehová.”
- La alabanza trae liberación
- La alabanza tiene el poder de cambiar nuestras circunstancias.
- Hechos 16:25-26: “Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios… y las cadenas de todos se soltaron.”
IV. La liberación de Dios en las aflicciones
A. Dios siempre libra al justo
- Librados en esta vida
- Dios puede librarnos físicamente de nuestras pruebas y dificultades.
- Daniel 3:27: “Ni siquiera olor de fuego tenían.”
- Librados en la eternidad
- Aunque no siempre somos liberados en esta vida, la victoria final es nuestra en Cristo.
- Apocalipsis 21:4: “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos.”
B. Dios usa las aflicciones para Su gloria
- Demostración de Su poder
- A través de nuestras pruebas, Dios muestra Su poder y fidelidad.
- Éxodo 14:13-14: “Estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros.”
- Cumplimiento de Sus propósitos
- Dios tiene un propósito eterno en cada prueba que enfrentamos.
- Jeremías 29:11: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, pensamientos de paz, y no de mal.”
V. Promesas de Dios para el justo en las aflicciones
A. Dios escucha el clamor del justo
- Respuesta inmediata de Dios
- Dios no es indiferente a nuestras necesidades.
- Salmo 34:17: “Claman los justos, y Jehová oye.”
- Dios está cerca del quebrantado
- Él está presente en los momentos de mayor necesidad.
- Salmo 34:18: “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón.”
B. Dios fortalece y sostiene
- Poder para resistir
- Dios nos da fuerzas para enfrentar cada prueba.
- Isaías 41:10: “No temas, porque yo estoy contigo.”
- Sustento en medio de las dificultades
- Su gracia nos sostiene en nuestras debilidades.
- 2 Corintios 12:9: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.”
C. Dios recompensa al justo
- Bendiciones eternas
- Las aflicciones de esta vida no se comparan con la gloria venidera.
- Romanos 8:18: “Las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera.”
- Victoria final en Cristo
- Al final, los justos reciben la corona de vida.
- Santiago 1:12: “Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida.”
Conclusión
El justo enfrentará muchas aflicciones, pero la promesa de Dios es clara: Él nos librará de todas ellas. Las pruebas no son señales de abandono, sino oportunidades para crecer en fe, depender más de Dios y ser testigos de Su poder. A través de cada aflicción, Dios nos transforma, nos fortalece y nos prepara para la gloria eterna.
Invitación final:
Hoy, si estás enfrentando aflicciones, recuerda que Dios está contigo. Clama a Él, confía en Sus promesas y espera Su liberación. Salmo 34:19: “Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.” ¡Descansa en la fidelidad de Dios y vive con la esperanza de Su victoria final!