Texto Base: Hebreos 12:2
“Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.”
Introducción
Vivimos en un mundo lleno de distracciones. Las preocupaciones, las tentaciones y las demandas diarias pueden desviar nuestra atención de lo verdaderamente importante: nuestra relación con Dios y nuestro propósito en Cristo. En Hebreos 12:2 se nos exhorta a mantener nuestros ojos fijos en Jesús, quien es el modelo perfecto de fe y perseverancia. Este bosquejo explora la importancia de no perder el enfoque espiritual, cómo evitar las distracciones y cómo permanecer firmes en el camino que Dios nos ha trazado.
I. La importancia de mantener el enfoque espiritual
A. El enfoque determina la dirección
- Lo que vemos guía nuestras acciones
- Al igual que un conductor debe mirar hacia adelante para mantenerse en el camino, nosotros debemos fijar nuestra mirada en Jesús para avanzar espiritualmente.
- Proverbios 4:25-27: “Tus ojos miren lo recto, y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante.”
- La distracción lleva a la confusión
- Perder el enfoque espiritual puede desviarnos del propósito de Dios para nuestras vidas.
- Santiago 1:8: “El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.”
B. Jesús como el modelo perfecto
- Autor y consumador de nuestra fe
- Jesús no solo comenzó nuestra fe, sino que también la perfecciona.
- Filipenses 1:6: “El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.”
- Su ejemplo de perseverancia
- Jesús soportó la cruz porque estaba enfocado en el gozo de cumplir la voluntad del Padre.
- Juan 4:34: “Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.”
C. El enfoque fortalece nuestra fe
- Nos ayuda a resistir las pruebas
- Al mantenernos enfocados en Dios, podemos superar cualquier dificultad.
- Isaías 26:3: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera.”
- Nos mantiene firmes en el propósito de Dios
- Mantener el enfoque nos permite cumplir nuestro llamado.
- Efesios 2:10: “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras.”
II. Distracciones que nos hacen perder el enfoque
A. Las preocupaciones de la vida
- El afán y la ansiedad
- Las preocupaciones del día a día pueden ahogar nuestra fe.
- Mateo 6:31-33: “No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?”
- El peligro de buscar seguridad en lo material
- Cuando nuestra atención está en lo terrenal, perdemos de vista lo eterno.
- Colosenses 3:2: “Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.”
B. Las tentaciones del mundo
- El amor al dinero y las riquezas
- La codicia y el deseo de acumular riquezas pueden desviar nuestro corazón.
- 1 Timoteo 6:10: “El amor al dinero es la raíz de todos los males.”
- Las atracciones pasajeras del pecado
- El pecado promete placer momentáneo, pero termina alejándonos de Dios.
- Hebreos 11:25: “Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado.”
C. La influencia de las relaciones incorrectas
- Amistades que nos apartan de Dios
- Las malas compañías pueden desviar nuestro enfoque espiritual.
- 1 Corintios 15:33: “No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.”
- Dependencia de la aprobación humana
- Buscar agradar a los demás más que a Dios nos aleja de Su propósito.
- Gálatas 1:10: “¿Busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios?”
III. Cómo mantener nuestro enfoque en Cristo
A. Poner nuestra mirada en lo eterno
- Vivir con una perspectiva celestial
- Recordar que nuestra ciudadanía está en el cielo nos ayuda a priorizar lo eterno.
- Filipenses 3:20: “Nuestra ciudadanía está en los cielos.”
- Invertir en el reino de Dios
- Vivir para Dios y no para las cosas temporales.
- Mateo 6:19-20: “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen.”
B. Permanecer en la Palabra de Dios
- Estudiar y meditar en las Escrituras
- La Biblia es nuestra guía para mantenernos enfocados en la voluntad de Dios.
- Salmo 119:105: “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.”
- Aplicar la Palabra en nuestra vida diaria
- No basta con escucharla; debemos vivirla.
- Santiago 1:22: “Sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores.”
C. Orar constantemente
- Buscar la dirección de Dios
- La oración nos mantiene conectados con Dios y enfocados en Su plan.
- 1 Tesalonicenses 5:17: “Orad sin cesar.”
- Renovar nuestras fuerzas en la oración
- La comunión con Dios nos fortalece para no desfallecer.
- Isaías 40:31: “Los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas.”
D. Caminar en el Espíritu Santo
- Permitir que el Espíritu Santo nos guíe
- El Espíritu Santo nos ayuda a discernir y mantenernos en el camino correcto.
- Juan 16:13: “Él os guiará a toda la verdad.”
- Depender del poder del Espíritu
- Sin el Espíritu Santo, es imposible mantenernos enfocados en Dios.
- Gálatas 5:16: “Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.”
IV. Beneficios de mantener el enfoque en Cristo
A. Paz en medio de las pruebas
- La paz que viene de confiar en Dios
- Mantener nuestros ojos en Jesús nos da paz en medio de las tormentas.
- Juan 14:27: “La paz os dejo, mi paz os doy.”
- Superar las preocupaciones y el miedo
- Confiar en Dios elimina el temor y la ansiedad.
- Salmo 56:3: “En el día que temo, yo en ti confío.”
B. Fortaleza para perseverar
- Poder para resistir la tentación
- El enfoque en Cristo nos ayuda a decir no al pecado.
- 1 Corintios 10:13: “Fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir.”
- Capacidad de avanzar en medio de la adversidad
- Mantener el enfoque en Dios nos da fuerza para seguir adelante.
- Filipenses 4:13: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.”
C. Recompensas eternas
- La promesa de vida eterna
- Aquellos que permanecen enfocados en Cristo recibirán la corona de vida.
- Santiago 1:12: “Bienaventurado el varón que soporta la tentación.”
- Cumplimiento del propósito de Dios
- Dios recompensa a quienes buscan primero Su reino.
- Mateo 6:33: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia.”
V. Advertencias sobre perder el enfoque
A. El peligro de la distracción
- Apartarse del camino de Dios
- Perder el enfoque puede llevarnos a la desobediencia y al pecado.
- Proverbios 14:12: “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte.”
- La pérdida de propósito
- Vivir desenfocados nos hace perder la visión del llamado de Dios.
- Efesios 5:15-16: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios.”
B. Consecuencias de la falta de enfoque
- Inestabilidad espiritual
- La falta de enfoque lleva a la duda y la inconstancia.
- Santiago 1:6: “El que duda es semejante a la onda del mar.”
- Pérdida de recompensas eternas
- Desenfocarnos puede costarnos la plenitud de las bendiciones de Dios.
- 1 Corintios 3:15: “Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida.”
Conclusión
Mantener nuestro enfoque en Cristo es esencial para vivir una vida plena y victoriosa en el Señor. A pesar de las distracciones y los desafíos, la clave es fijar nuestra mirada en Jesús, quien es nuestro guía, fortaleza y esperanza eterna.
Invitación final:
Hoy, examina tu vida. ¿Estás enfocado en Cristo o has permitido que las distracciones te alejen de Su propósito? Renueva tu compromiso de buscar a Dios con todo tu corazón y de mantener tu mirada fija en Jesús. Como dice Hebreos 12:2: “Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe.” ¡No pierdas tu enfoque, porque en Cristo encontrarás la fuerza para superar cualquier circunstancia y alcanzar la victoria eterna!