Texto Base: Salmo 90:12
“Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.”
Introducción
La vida es un regalo de Dios y, como tal, debemos aprender a valorarla y vivirla con propósito. En el Salmo 90, Moisés reflexiona sobre la brevedad de la vida humana frente a la eternidad de Dios, y nos invita a pedirle sabiduría para aprovechar cada día que Él nos concede. Este bosquejo explora qué significa contar nuestros días, por qué es importante y cómo podemos vivir una vida significativa y centrada en Dios.
I. La brevedad de la vida
A. La fugacidad de la existencia humana
- La vida es como un vapor
- La Biblia compara nuestra vida con un vapor que aparece por un momento y luego se desvanece.
- Santiago 4:14: “Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.”
- La fragilidad del ser humano
- Nuestra existencia es temporal y frágil; dependemos completamente de Dios.
- Salmo 103:15-16: “El hombre, como la hierba son sus días; florece como la flor del campo, que pasó el viento por ella, y pereció.”
B. La eternidad de Dios
- Dios es eterno
- En contraste con nuestra vida limitada, Dios es eterno y soberano.
- Salmo 90:2: “Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.”
- Nuestra relación con el Dios eterno
- Reconocer la eternidad de Dios nos ayuda a vivir con humildad y dependencia de Él.
- Isaías 40:28: “El Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra.”
II. ¿Qué significa contar nuestros días?
A. Reconocer la importancia del tiempo
- El tiempo es un recurso limitado
- Dios nos da un número limitado de días, y debemos aprovecharlos sabiamente.
- Eclesiastés 3:1: “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.”
- No desperdiciar el tiempo
- Contar nuestros días implica evitar el desperdicio de tiempo en actividades vanas o sin propósito.
- Efesios 5:15-16: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo.”
B. Vivir con un propósito eterno
- Buscar primero el reino de Dios
- Contar nuestros días significa vivir para lo que realmente importa: el reino de Dios.
- Mateo 6:33: “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia.”
- Hacer tesoros en el cielo
- Debemos invertir nuestro tiempo en aquello que tiene valor eterno.
- Mateo 6:19-20: “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen… sino haceos tesoros en el cielo.”
III. Por qué debemos aprender a contar nuestros días
A. Porque la vida es incierta
- No sabemos cuánto tiempo tenemos
- Nadie tiene garantizado el mañana; por eso debemos vivir con urgencia y propósito.
- Proverbios 27:1: “No te jactes del día de mañana; porque no sabes qué dará de sí el día.”
- Estar preparados para la eternidad
- Contar nuestros días nos ayuda a vivir preparados para encontrarnos con Dios.
- Amós 4:12: “Prepárate para venir al encuentro de tu Dios.”
B. Porque somos administradores del tiempo
- Dios nos pedirá cuentas
- Somos responsables de cómo usamos el tiempo que Dios nos da.
- 2 Corintios 5:10: “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo.”
- Ser diligentes en nuestras tareas
- Contar nuestros días implica cumplir con nuestras responsabilidades con excelencia.
- Colosenses 3:23-24: “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.”
C. Porque la vida tiene un propósito divino
- Fuimos creados con un propósito
- Cada persona tiene un llamado específico de parte de Dios.
- Efesios 2:10: “Somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras.”
- Glorificar a Dios con nuestra vida
- Contar nuestros días nos lleva a vivir para glorificar a Dios en todo lo que hacemos.
- 1 Corintios 10:31: “Ya sea que comáis o bebáis, o hagáis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.”
IV. Cómo aprender a contar nuestros días
A. Buscar la sabiduría de Dios
- Orar por sabiduría
- Debemos pedirle a Dios que nos enseñe a vivir sabiamente.
- Santiago 1:5: “Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios.”
- Vivir conforme a Su Palabra
- La Biblia nos da la guía para vivir con sabiduría y propósito.
- Salmo 119:105: “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.”
B. Priorizar lo eterno sobre lo temporal
- Evitar las distracciones
- Debemos enfocarnos en lo que tiene valor eterno, dejando de lado las distracciones terrenales.
- Lucas 10:41-42: “Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria.”
- Invertir en el reino de Dios
- Nuestro tiempo y esfuerzos deben estar dedicados a servir a Dios y a los demás.
- Gálatas 6:9: “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.”
C. Vivir cada día como si fuera el último
- Tener un corazón agradecido
- Cada día es un regalo de Dios, y debemos vivirlo con gratitud.
- Lamentaciones 3:22-23: “Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.”
- Estar listos para el encuentro con Dios
- Vivir con la expectativa de que cada día puede ser el último nos lleva a estar preparados espiritualmente.
- Lucas 12:40: “Vosotros también, estad preparados; porque a la hora que no penséis, el Hijo del Hombre vendrá.”
V. Los beneficios de contar nuestros días
A. Una vida con propósito
- Vivimos con dirección
- Contar nuestros días nos ayuda a vivir con un enfoque claro en el propósito de Dios.
- Proverbios 16:9: “El corazón del hombre piensa su camino; mas Jehová endereza sus pasos.”
- Evitar el desperdicio de tiempo
- La sabiduría nos ayuda a aprovechar cada momento para glorificar a Dios.
- Eclesiastés 12:13: “El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos.”
B. Paz y satisfacción
- La paz de estar en el centro de la voluntad de Dios
- Al vivir conforme al propósito divino, experimentamos verdadera paz.
- Isaías 26:3: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera.”
- La satisfacción de cumplir nuestra misión
- Como Pablo, podemos decir al final de nuestra vida que hemos peleado la buena batalla.
- 2 Timoteo 4:7: “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.”
C. Un legado eterno
- Impactar a las futuras generaciones
- Al vivir sabiamente, dejamos un ejemplo para quienes nos siguen.
- Salmo 78:4: “Contaremos a la generación venidera las alabanzas de Jehová.”
- Tesoros en el cielo
- Vivir con sabiduría y propósito nos asegura una recompensa eterna.
- Apocalipsis 22:12: “He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo.”
VI. Ejemplo de personas que contaron sus días
A. Moisés: Un líder que dependió de Dios
- A pesar de las dificultades, Moisés buscó siempre la dirección de Dios.
- Éxodo 33:15: “Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.”
B. Pablo: Una vida entregada al propósito de Dios
- Pablo vivió con un enfoque claro en cumplir la misión que Dios le había dado.
- Hechos 20:24: “De ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo.”
C. Jesús: El ejemplo perfecto
- Jesús vivió cada día con propósito, cumpliendo la voluntad del Padre.
- Juan 17:4: “Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese.”
Conclusión
Contar nuestros días no significa simplemente medir el tiempo, sino vivir con sabiduría, propósito y un enfoque eterno. La vida es breve, pero puede ser significativa si la vivimos para Dios y Su gloria.
Invitación final:
Hoy es el día para pedirle a Dios que nos enseñe a contar nuestros días. Reflexiona sobre cómo estás usando el tiempo que Dios te ha dado y comprométete a vivir una vida que honre a Su nombre. Como dice el Salmo 90:12, “Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.” ¡Vive cada día con propósito, sabiendo que el tiempo que tenemos es un regalo de Dios!